Portada del libro de J.K. Rowling |
Al leer esta noticia me he preguntado por las razones que han empujado a Rowling a publicar de esta manera. En siglos pasados era una práctica común encontrar autores que se escondían bajo otros nombres. Por ejemplo, el siglo XVIII muchos autores elegían un seudónimo para practicar el ejercicio de una escritura que era considerado innoble e impropio de personas pertenecientes a las 'altas esferas'. Además, este 'caparazón' les servía para criticar a diestro y siniestro sin perder las amistades, y sin que los allegados se vieran reflejados en ningún personaje de sus escritos.
Otro caso de travestismo literario es de aquellas autoras del siglo XIX que se escondían bajo nombres masculinos para que se las tomara en serio, y para que sus obras pudieran ser encumbradas a lo más alto, y no relegadas a la posición secundaria que tenían las obras escritas por mujeres. Existen muchos casos famosos, como el de las hermanas Brontë, que publicaron un libro de poemas como los Hermanos Bell, o como el de George Eliot, seudónimo bajo el que se escondía la escritora Mary Anne Evans. Otros casos famosos son el de la escritora francesa George Sand.
Retrato de George Eliot (Mary Anne Evans) |
Durante el siglo XX también se descubrieron casos de seudónimos de autores famosos que quisieron escribir en el anonimato. El caso más curioso es el de Stephen King, que escribió durante finales de los 70 y la primera mitad de los 80 con el seudónimo de Richard Bachman. Muchos de sus fans se dieron cuenta de que el estilo de este nuevo escritor era similar al de King, y éste se empeñó en negar la mayor hasta que se descubrió su autoría por un documento de la editorial. Finalmente King 'mató' oficialmente a Richard Bachman por un 'cáncer en el seudónimo', y no ha vuelto a utilizar este nombre.
Otro caso muy reciente es el de la escritora Anne Rice, famosa por sus obras góticas y especialmente por Entrevista con un vampiro, que ha utilizado dos seudónimos para poder escribir otro tipo de obras o esconderse de su famoso nombre. Así ha figurado como Anne Rampling o A.N. Roquelaure en varios escritos de su autoría.
Otros autores decidieron utilizar seudónimos bien porque preferían no ser identificados con sus escritos, bien porque sus nombres no eran lo suficientemente atractivos para figurar en las obras. En la mayoría de los casos se ha tratado de buscar un nombre más sencillo y/o comercial. Algunos ejemplos serían el de Pablo Neruda, cuyo nombre real era Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto; el de Lord Byron, cuyo nombre real era George Gordon.
Retrato de Lord Byron (George Gordon) |
¿Cuáles son las razones que han podido empujar a Rowling a publicar bajo un seudónimo masculino? Ella argumenta que quería tener la oportunidad de presentarse al público sin la pesada carga de Harry Potter a sus espaldas, y probablemente era una manera de enfrentarse a la crítica con un género nuevo, partiendo de cero. Otros aseguran que se trata de una maniobra editorial para hacer que el libro recupere el nivel de ventas que se esperaba de él (de hecho las ventas se han disparado en Amazon), a pesar de que esto supondría que el éxito de la obra vendría propiciado por la fama del autor y no por la calidad del texto. Sea como fuere, Rowling se une a una larga lista de escritores y escritoras que han decidido utilizar un seudónimo, ya sea de manera temporal o definitiva, para ocultar su sexo o su estatus social, para hacer un nombre más atractivo o para rendir homenaje a la ciudad que les ha visto crecer :).
Imagen de The Cuckoo's Calling tomada de: http://en.wikipedia.org/wiki/The_Cuckoo's_CallingImagen de Mary Anne Evans tomada de: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:George_Eliot.jpgImagn de Lord Byron tomada de: http://en.wikipedia.org/wiki/Lord_Byron